martes, 15 de noviembre de 2011

La Apuesta en Responsabilidad Social Corporativa

Hoy he leído un interesante artículo sobre Responsabilidad Social Corporativa (RSC) en el blog 3.500 millones de elpais.es. Este blog trata sobre relatos de la contra-crisis y sus protagonistas. Se pretende demostrar, que lo correcto es también lo más inteligente, a través del análisis de vivencias e iniciativas.

Cualquier día de la semana. Cualquier canal de TV en horario Prime Time: los informativos bombardean nuestros tímpanos con palabras que han entrado a formar parte de nuestro vocabulario, aunque en realidad, no dominemos su correcto significado: prima de riesgo, burbuja inmobiliaria, Ibex 35, créditos... Los casos de corrupción y estafa son noticias que conviven con las de economía, sociedad o política, sin orden preestablecido.


Pero ¿A que nos referimos con el termino RSC? Según Wikipedia, la Responsabilidad Social Corporativa, también llamada Responsabilidad Social Empresarial (RSE), puede definirse como la contribución activa y voluntaria al mejoramiento social, económico y ambiental por parte de las empresas, generalmente con el objetivo de mejorar su situación competitiva, valorativa y su valor añadido. El sistema de evaluación de desempeño conjunto de la organización en estas áreas, es conocido como el triple resultado.



En España comenzamos a oír el término de RSC a principios de los  90. La superpoblación, la internacionalización de las empresas y la imparable degradación del planeta, hicieron saltar las alarmas. Organizaciones no gubernamentales comenzaron a ser visibles a través de las denuncias a empresas que incumplían los principios básicos de respeto, compromiso o responsabilidad en sus actuaciones empresariales. Veinte años después, todavía algunos piensan que es preciso incorporar la RSC por asuntos de imagen, exigencias de los mercados externos, por motivaciones éticas o porque mejora la gestión y la rentabilidad.


La Unión Europea, consciente de la importancia de una correcta aplicación de esta contribución por parte de las empresas, publicó el pasado 25 de octubre, su revisión de la estrategia para la RSC. Poco a poco, Gobiernos, Instituciones, ONGs, empresas y diferentes colectivos están impulsando el respaldo definitivo para que esta práctica no se limite a un simple decálogo de buenas actuaciones, por parte de un número limitado de multinacionales.

Y como no estamos hablando de utopías, a nivel individual, cada uno de nosotros también debemos unirnos a esa responsabilidad, apoyando y difundiendo (y con las redes sociales lo tenemos bien fácil), aquellas iniciativas que nazcan en el seno de estos departamentos para que, en un futuro no muy lejano, podamos oír, en los mismos informativos en los que ahora priman las noticias sobre corrupción, titulares donde la transparencia empresarial y un serio compromiso con la sociedad, nos anime a seguir apostando por un mundo mejor.






viernes, 4 de noviembre de 2011

La televisión contra las redes sociales.

La polémica está servida. La semana pasada el periodista Jordi González, entrevistaba en su programa "La Noria" de Tele 5, a la madre del "Cuco", uno de los principales imputados en el caso Marta del Castillo. Ya durante la emisión en este prime time de los sábados, numerosos espectadores, a través de la web de esta cadena y las redes sociales, mostraron su malestar por la intervención de esta señora. Los 10.000 euros pagados, levantaron ampollas, y en las redes sociales, la noticia estalló como un auténtica acción viral.

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Las consecuencias de esta entrevista "bomba", que claramente buscaba audiencia, no se han hecho esperar y durante esta semana hemos asistido a hechos muy relevantes en el mundo del marketing y la publicidad: cinco anunciantes de peso (Nestlé, President, Campofrío, Bayer y Puleva), han comunicado que retiran su publicidad en este programa, cediendo ante la presión de los consumidores. Esta decisión, es la consecuencia de una acción promovida por el periodista Pablo Herreros, donde animaba, a través de sus herramientas de comunicación personal en las redes (Blog, Twitter, Facebook..), a solicitar la suspensión de sus inversiones publicitarias, a todas aquellas empresas anunciantes en esta franja.

Tal ha sido la repercusión de este caso, que no sólo los usuarios han hablado largo y tendido.  Ya podemos encontrar artículos, en diarios digitales especializados en marketing, donde se analiza lo que ya se conoce como la "Revolución de los usuarios y consumidores junto a las marcas".

Pero yo me pregunto: ¿no son la marcas conscientes del contenido y perfil del programa donde invierten sus presupuestos publicitarios?. Además de periodista, durante los últimos 14 años he trabajado como planificadora de medios, asesorando a las empresas, cómo rentabilizar sus inversiones, en aquellos medios de comunicación afines a las marcas y con más audiencia. Pensemos pues en voz alta:

- ¿Están mal asesoradas estas empresas / multinacionales?....lo dudo.
- ¿Estamos asistiendo a un juicio de doble moral? Puede ser.
- De toda esta historia ¿quién ha conseguido sus 15 minutos de gloria?...adivina, adivinanza...
- ¿Han aprovechado estas empresas para hacer una campaña de imagen gratuita?...no soy yo quien para contestar.
- ¿Decidirán ahora los consumidores, dónde tienen que anunciarse las marcas que consumen?...ahí es donde quiero llegar. La revolución 2.0 nos obliga a todos (consumidores, marcas y medios de comunicación) a establecer un permanente pulso con las redes, y averiguar cuáles son los temas de conversación, gustos, preferencias y un largo etcétera sobre los usuarios.

Como periodista que soy, me pongo en la piel de Jordi González. Hay veces que la presión por parte de la cadena, para conseguir determinados parámetros de audiencia semana tras semana (lo que se traduce en inversión publicitaria), te obligan a poner en práctica aquello que reza "no permitas que una mala noticia, te estropee un buen titular", pero viendo los toros desde la barrera, quizás habría lanzado un "globo sonda" en las redes, para prevenir consecuencias de este tipo. 

Conclusión. ¡De todo se aprende! Aunque en este caso, prefiero aprender cuando le sucede al vecino....